Disavow: cómo eliminar enlaces tóxicos

Pablo Herrera

Pablo Herrera
Head of SEO & Content

Eliminar enlaces tóxicos mediante la herramienta Disavow es una de las opciones de SEO técnico que pueden marcar la diferencia en nuestra página web. Una manera efectiva de que Google no tenga en cuenta esos dominios que apuntan a nosotros y no nos interesan.

En realidad, más que eliminar enlaces tóxicos, tenemos que traducirlo literalmente y llamarlo desautorizar. Los enlaces no van a desaparecer de la página que nos está enlazando, simplemente Google no los va a tener en cuenta.

Sería más fácil hablar con el propietario del dominio y pedirle que eliminase el enlace, pero no siempre es posible. Lo más normal es que ni siquiera nos contesten. Aun así, no está de más intentarlo, será aún mejor eliminar los enlaces tóxicos que desautorizarlos.

Antes de explicarte cómo usar Disavow en Google Search Console, déjame explicarte qué son los enlaces tóxicos, de dónde surgen y por qué es importante evitarlos. Con

La historia de los enlaces tóxicos

Enlace web

Los enlaces tóxicos y yo tenemos nuestra propia historia personal. Hace una década ya, es increíble cómo pasa el tiempo, me mudé a Madrid tras resultarme imposible trabajar de cualquier cosa en mi Cádiz natal ni en la Sevilla en la que estudié mi carrera y mi master.

Por supuesto, no llegué y empecé a trabajar como SEO, que además era un puesto que apenas estaba empezando a mencionarse. Por el contrario, empecé como cajero reponedor en una conocida cadena de supermercados.

Incluso me entrevistaron en varias cadenas de televisión y radio por qué en ese momento, en el final de la crisis económica, se llevaba mucho lo de estudiar una carrera y terminar en un puesto no especializado.

Curiosamente, esa aventura salió bien y me ofrecieron mi primer trabajo como redactor SEO, como freelance para una agencia de marketing digital, y sin que me permitiera dejar el trabajo de cajero reponedor. Pero fue un primer paso que me llevó hasta dónde estoy hoy.

La cuestión es que en ese momento los enlaces tóxicos no existían. A Google le encantaban los enlaces, todos, sin excepción. Y si querías posicionar una página, la manera más fácil de hacerla era conseguir muchísimos enlaces en cualquier página, blog, foro, etc.

Mi trabajo consistía principalmente en escribir artículos cuyo contenido daba exactamente igual. Lo único que era relevante es que tuviera un enlace con un texto de anclaje determinado a la página que había contratado el servicio. Luego la agencia buscaba donde colocarlo.

Pero eso no importaba mucho. De hecho, la agencia me ofrecía diez euritos por cada página en la que pudiera colocar unos de esos artículos. O, al menos, un anchor text con un enlace a la página que les interesase. Cualquier página o blog valía. No hacían distinciones.

El problema con los enlaces

Hilo y tornillos simulando enlaces en fondo blanco

Estos enlaces terminaron suponiendo un problema para Google. También para el usuario. Al final, no se estaba premiando a las mejores páginas, sino a las que tenían más enlaces.

Lo importante era contar con una agencia que te colocase en todo tipo de blogs, independientemente de la relación que tuviese con tu temática. Se valoraba la cantidad y no la calidad.

Entonces Google cambió su algoritmo y decidió que lo importante era la calidad. ¿Qué entendía Google por un enlace válido? Pues un enlace en una página con autoridad, ya fuera general (como Wikipedia, un medio de comunicación o una administración pública) o del ámbito específico del tema de la keyword.

Es decir, si tenemos un pienso de mascotas, es relevante que estemos en una página sobre mascotas, pero un enlace en Media Markt no tendría ningún valor, por mucho que Media Markt sea para Google una página con autoridad.

Con el paso de los años, este algoritmo se ha ido perfeccionando y penalizando aquellos casos en los que, por ejemplo, detecta que hay página, en muchos casos medios de comunicación, que colocan comercializan enlaces.

Si una página que Google ha detectado que tiene una relación fraudulenta con sus enlaces, nos tiene enlazada, Google va a definir ese enlace como un enlace tóxico y nos va a penalizar.

Lo que era una práctica común en SEO hace diez años, ahora es 100% Black Hat SEO.

¿Qué son los enlaces tóxicos?

Ejemplo de enlaces tóxicos
Visión general de enlaces tóxicos (en rojo) en SEMrush

Para aclararnos, los enlaces tóxicos son aquellos que penalizan el posicionamiento de nuestro sitio.

Nos penalizan porque Google entiende que son fraudulentos. Es importante no confundir con enlaces de poca calidad, que no tienen por qué penalizarnos.

Por ejemplo, si tengo una agencia de viajes y me enlaza un blog de viajes que acaba de comenzar, ese enlace no tendrá prácticamente valor para Google, pero lo entenderá como pertinente, ya que pertenece a la misma temática y “tiene sentido”.

Aquí entra otro aspecto que es el link juice, que se trata de la autoridad que se trasmite con los enlaces, pero eso es tema para otro post.

En este caso, hablamos de enlaces tóxicos y para ver cuáles son estos enlaces la única opción que tenemos es utilizar alguna herramienta SEO como Ahrefs o SEMrush. De hecho, algunas de estas herramientas permiten utilizar el disavow comunicándose directamente con Google Search Console.

Como, de momento, ninguna herramienta es infalible, siempre es interesante revisar qué vamos a desautorizar. Es posible que alguno de los enlaces que nos señalen no sean realmente tóxicos y nos hayan puesto en alerta por una baja puntuación en autoridad de dominio.

Haciendo un análisis de enlaces podremos comprobar cuántos de estos enlaces tenemos. Si vemos como en el ejemplo superior que la mayor parte de nuestros enlaces son tóxicos, no hay que desesperar. Al contrario, es una buena noticia, porque hemos detectado la “enfermedad” y ahora podemos ponerle cura.

Si no sabes si tienes el criterio suficiente para saber si un enlace es tóxico o no, puedes consultar las políticas de spam de Google.

¿Cómo desautorizar enlaces con Disavow?

cómo desautorizar enlaces

Para desautorizar enlaces con Disavow solo hay que seguir dos pasos muy simples. Primero, hay que crear una lista que incluya todos los enlaces tóxicos que enlacen a nuestra web.

Segundo, hay que subir el archivo. Es importante tener en cuenta que solo podemos tener un archivo subido por lo que es un trabajo que hacer una vez. Más tarde, podemos eliminar la lista y subir una nueva, pero no podemos añadir más información a la lista que esté en la herramienta.

Por eso, Google recomienda no utilizar esta función hasta que tengamos un número significativo de enlaces tóxicos y tengamos constancia de que nos está perjudicando.

Si no tienes herramientas de pago, recuerda que dentro de Google Search Console hay un apartado de Enlaces donde podemos consultar todos los enlaces internos y externos que Google está considerando y exportarlos.

Eso sí, no tendremos la información específica de si Google considera o no que x enlace sea tóxico.

Crear una lista

Lista en blanco

Para crear la lista tenemos que crear un archivo en el que incluir la misma. Su formato debe ser .txt, por lo que vale con una página del Bloc de Notas.

Luego, línea a línea, debes añadir el listado de las URLs o dominios que quieras desautorizar. Tienes que añadirlo con su protocolo, ya sea http o https, si no no va a funcionar. Es decir, cada URL o dominio en una línea diferente.

Igualmente, podemos desautorizar dominios o subdominios al completo. Para ello hay que añadir primero “domain:” y luego meter el dominio.

Si es importante saber que las URLs no pueden tener más de 2048 caracteres (si tienen más, desautoriza el dominio directamente) y que el archivo no puede pesar más de 2 MB ni tener más de 100.000 líneas.

Además, si te ayuda en la organización del archivo, puedes poner líneas con notas empezando por #. Estas líneas serán ignoradas por Google.

Por ejemplo:

#URLs completas que quiero desautorizar con Disavow:

https://publicidadenganosa.spam/enlacecomprado

http://notasdeprensa.fake/noticia-inventada

#Dominios y subdominios que quiero desautorizar:

domain:notasdeprensa.fake

domain:maspam.publicidadenganosa.spam

Subir el archivo

Seleccionar propiedad en Disavow

Una vez que tengamos el formato listo, toca subir el archivo a Disavow.

Podemos hacerlo muy fácilmente. Primero vamos a la página de la herramienta.

Ahí tendremos que seleccionar una propiedad de la lista de propiedades de Google Search Console que tengamos. Dependiendo de nuestro tipo de propiedad, podremos utilizar o no la herramienta. De lo contrario, tendremos que acudir a la alternativa manual y pedir la eliminación de los enlaces directamente.

Si solo tenemos una propiedad, entraremos directamente en ella.

Hay que tener en cuenta que la lista que subamos no se comparte entre las distintas propiedades. Es decir, cada propiedad de dominio puede tener una única lista, pero pueden ser diferentes entre distintas propiedades de dominios.

En el caso de que ya exista una lista, podrás ver un ejemplo de páginas y dominios desautorizados en la lista anterior. Cuando subas la nueva, la anterior desaparecerá.

Simplemente hay que clicar en el botón y podremos seleccionar el archivo .txt que hemos preparado.

Si hay algún error, la herramienta nos avisará de ello. En ese caso, no se cambiará la lista, sino que se mantendrá la existente (o ninguna si no había una lista previa). Toca corregir y volver a subir.

Una vez subida, hay que tener paciencia. Google puede tardar varias semanas en incorporar tu lista a su índice. Su algoritmo volverá a rastrear la web y procesar las páginas que vaya encontrando.

Volver a autorizar todas las páginas desautorizadas

Autorizar enlaces

También tenemos la posibilidad de eliminar la lista sin sustituirla por otra. Para ello, solo tenemos que seleccionar una propiedad en la lista de propiedades, como hemos hecho en el paso anterior.

Una vez dentro, podremos clicar en el botón de cancelar las desautorizaciones. Así, quitaremos la directriz y Google volverá a tener en cuenta todos los enlaces que haya a nuestro sitio.

Como cuando se incorpora una nueva lista, no se trata de una acción automática, sino que pueden tardar semanas en incorporarse al índice de Google. Con todo lo relacionado con el rastreo y la indexación en nuestra estrategia de contenidos SEO, la paciencia va a ser nuestra mayor aliada.

Si tienes problemas con enlaces tóxicos, en Ddigitals somos expertos en SEO y podemos ayudarte.